PROYECTO ALTERNATIVO PARA PUEBLA 2010, DESDE LA IZQUIERDA.

Luis Ortega Morales
La izquierda en Puebla y en el país puede avanzar siempre y cuando ponga por delante sus principios políticos que no son otra cosa que el conjunto de valores que ha construido a través de la historia. Estos son claros y no se ponen en discusión en un proceso electoral. La identificación con los pobres y sus luchas, la transformación del sistema capitalista por otro que imponga la igualdad política, económica y social, la distribución equitativa del ingreso, que preserve el medio ambiente y rescate la dignidad ciudadana, la tolerancia y la libertad del ser humano para hacer lo que decida con su cuerpo, sus preferencia religiosas, educativas, culturales, sociales y económicas.
Estos valores políticos se proponen a la sociedad en un programa, cuando se participa en cualquier contienda electoral o en un debate sobre la sociedad y el estado; están por encima de los intereses personales o de grupo.
Para avanzar en este propósito, la izquierda busca aliados, principalmente entre los pobres, los explotados y sus organizaciones, que estén de acuerdo con la sustitución del capitalismo, del estado y la oligarquía que lo sostiene.
En México, la oligarquía ha logrado crear un gran frente partidario que le ha permitido preservar el poder con diferentes siglas y ha logrado un sistema jurídico, económico y electoral que le garantiza sus triunfos, aunque no su legitimidad y reconocimiento popular. Pretenden prolongar su dominio por otros 50 años con iniciativas como las leyes de la familia, que impulsó en un acuerdo con la iglesia, la reelección y la segunda vuelta, garantizando que las reformas hasta ahora han logrado no sean modificadas y por otro lado, garantizar que no pueda llegar a gobernar la izquierda en un posible triunfo electoral como ya lo hizo con Cárdenas o López Obrador.
La alianza PRI y PAN, desde el gobierno de Miguel de la Madrid, har ealizado muchas reformas legales y las ha consolidado con Carlos Salinas de Gortari y el gobierno del PAN. Para ello ha utilizado a diversos aliados en contiendas electorales y en las cámaras. Ahora se encuentran en una franca crisis, que le impide detener al narcotráfico, una de sus más grandes creaciones.
En Puebla, algunos partidos de izquierda, para avanzar en su objetivo, han propuesto a candidatos de la derecha, empresarios o resentidos de otros partidos, muy pocos han sido demócratas o progresistas. En diversos casos, tanto el PRI como el PAN han metido las manos en estos partidos para incorporarlos a su juego, a través de prebendas y ofrecimientos principalmente económicos y han logrado sus objetivos llevándolos a discusiones con argumentos falsos y superficiales.
En la presente coyuntura electoral en Puebla, los intereses económicos y de poder se están enfrentando, por lograr la hegemonía y el control absoluto de las ganancias, por un lado, el grupo emergente de Mario Marín que ha desplazado a los viejos grupos del avilacamachismo y que sostenían un acuerdo histórico con la iglesia y los empresarios. Este grupo ha roto con ellos y ha construido un nuevo polo de poder económico y político con los empresarios emergentes sobre todo a partir de la industria de la construcción, inmobiliaria, financiera, transportista y el capital extranjero principalmente exportador.
Por otro lado, alrededor de Rafael Moreno Valle Rosas se han reaglutinado los grupos económicos desplazados y y otros que no han podido avanzar, a pesar de los múltiples acuerdos que han tomado con el grupo marinista, desde los grupos locales hasta con el presidente de la República.
Ante la ausencia de un acuerdo Marín-Calderón, el enfrentamiento es inminente, el cual seguramente polarizará a la sociedad poblana. En esta lucha, el grupo marinista tiene el control burocrático institucional, principalmente de los medios de comunicación y del aparato electoral, que le da ventajas sobre su oponente. Una alianza multiclasista y plural, con miembros del PRD, de la sociedad civil y de otros partidos, puede ser un atractivo para que el grupo de empresarios alrededor de Moreno Valle avance.
En este contexto, la izquierda no puede más que ratificar sus principios políticos y puede avanzar, con seguridad, enarbolándolos con fuerza, organizándose en un gran frente que denuncia este enfrentamiento entre empresarios y proponiendo un PROYECTO ALTERNATIVO PARA PUEBLA DESDE LA IZQUIERDA.
Es por ello que varios militantes del movimiento social, miembros de diversos partidos políticos, individuos y profesionistas, nos hemos hecho presentes en este debate y convocamos al Taller de discusión y elaboración, para el próximo jueves y viernes 14 y 15 de enero de 2010.