15/Noviembre/2009/23:35:45
En la “Marcha por la paz, más seguridad, ni un secuestro más y mejores policías”, se reveló de manera oficial, por parte del representante del “Observatorio ciudadano”, Sabino Vázquez, que en Huauchinango se han suscitado 14 secuestros; pero los fraudes telefónicos son más frecuentes, entre otras acciones de la delincuencia organizada.
Por: HERIBERTO HERNÁNDEZ
En el fin de semana se dio un hecho sin precedentes, centenares de personas marcharon por las principales calles de la ciudad de Huauchinango, partieron de la avenida, Revolución, a la altura de las instalaciones de la Cruz Roja, hasta llegar al zócalo. Aunque algunos personajes de la vida política activa habían anunciado su apoyo a la marcha y su solidaridad, estuvieron ausentes en el desfile del largo contingente, estuvieron familias a las que tradicionalmente se les identifica con partidos políticos como el Acción Nacional PAN y el Revolucionario Institucional PRI, pero no aspirantes, dirigentes o figuras parecidas. Al momento en que llegó el bloque de personas vestidas con playeras, blusas, camisas, gorras u otras prendas de color blanco; Gildardo Velázquez Castelán, lanzó críticas al estarse armando el presídium de quienes participaron en la convocatoria de la marcha: “Yo veo que la mayoría de los que estamos acá no somos gente de la política, por lo que pienso que no está bien que haya personas políticas ahí enfrente, que no se haga político esto, porque entonces no va a funcionar”. -¿Quiénes son los políticos que se está aprovechando? “No quiero hacer alusiones personales, pero ustedes como periodistas los conocen bien y no se vale que hagan esto”, contestó don Gildardo Velázquez. – “sé que con esto me estoy llevando a muchos en los cascos, pero no voy a mencionar nombres”. Terminó de hacer su manifestación casi al pie del templete y se retiró del lugar. En el presídium estuvieron integrantes de distintas agrupaciones civiles con el movimiento por la paz en México, de Huauchinango, estuvo José Gustavo Corona, párroco de la ciudad, integrantes de la familia Vite Vargas, transportistas, la familia Marroquín, y demás comerciantes. PADRE CORONA El párroco fue el primero en tomar la palabra, calificó a la marcha como ciudadana, “no de asuntos políticos, como se quiere ver, esto es ciudadano” y continuó con su discurso, cuestionó, que vale más decir un “ya basta, que un quién sigue, porque nos da miedo de lo que puede pasar”. Compartió que hace unos días, un sacerdote de la comunidad de La Ceiba, municipio de Xicotepec, tuvo que ser cambiado porque ya no soportaba tantas amenazas telefónicas. “A mí me han ido a platicar sus penas y me dice una señora, que por una extorsión telefónica, se tuvo que endeudar con 20 mil pesos; ya no daré más detalles, pero sí que Huauchinango siempre había sido un lugar de paz y tranquilidad. Yo digo que esas personas que se dedican a delinquir también tienen mamá, papá, tienen hijos, tienen hijas y no les deseo que les pase lo mismo que ellos hacen, pero tal vez sea la única forma de que comprendan lo que sienten las familias a las que le hacen daño”. “Por eso digo que vale más un ya basta y no un quién sigue. Los invito y les pido que si los llaman a hacer una asociación en defensa de la paz, acudan, no le dejen esta tarea a un grupito de personas, si estamos unidos como ahorita, lo lograremos”.
SIN CIUDADANÍA SEGUIREMOS SIN PAZ
El integrante del Comité Nacional de Participación Ciudadana, Jesús Corona, asignó en gran medida la inseguridad a los distintos problemas sociales, como el consumo de drogas en el país, “principalmente en las escuelas, en las que se ha elevado el consumo en cantidades no imaginadas antes, lo mismo pasa con el alcoholismo y la violencia intrafamiliar”. Pidió a la ciudadanía huauchinanguense organizarse para luchar con el fenómeno de la inseguridad, “si los ciudadanos no participábamos el problema va a seguir creciendo, tenemos que convertirnos en observadores ciudadanos, si es que hay una organización, me comprometo a dar una capacitación a los integrantes de Huauchinango de la asociación que formen, de lo contrario esto va a tardar mucho en solucionarse”. Instó a llamar a los medios de comunicación y a los distintos líderes sociales, como instituciones de distinta índole, “sino este problema va a seguir creciendo, como ciudadanos tenemos que evaluar a la policía, cómo está su equipo, cómo trabaja el ministerio público y muchas cosas más importantes que se deben de incluir” OBSERVATORIO CIUDADANO Sabino Vázquez, integrante del denominado Observatorio Ciudadano, consideró que en el país hay una verdadera situación difícil, “ya no se puede salir a la calle de una manera tranquila, nuestros hijos cuando no están en casa imaginamos dónde estarán y si los volveremos a ver, hay un miedo generalizado”. Dijo que el Observatorio ciudadano, opera en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, “nosotros estamos por no más víctimas, sabemos que después de un secuestro todo se vuelve más difícil, ya nada es igual, acá en Huauchinango, sabemos que llevan 14 secuestros, es de gente que está entre nosotros, que conocemos, que son nuestro vecinos”, dijo que por las víctimas que conocen de este mal y por los que no queremos que sepan de esto, es necesaria la organización por la paz y la seguridad.
JUSTICIA, ASIGNATURA PENDIENTE
El abogado y activista de la “Marcha por la paz, más seguridad, ni un secuestro más y mejores policías”, Jesús Arrona mencionó algunos pendientes en materia de impartición de justicia, señaló que la violencia en México padece de muchos males, tales como la impunidad en la que se mueven muchos de los encargados de la impartición de justicia; indignación por la corrupción, en esto va el trato de los funcionarios a las víctimas del delito por parte de los Ministerios Públicos, siempre se nos pide que denunciemos, pero nada nos garantiza que del lado de la ley no esté el delincuente, por lo que nos ponemos en riesgo de una represión. “Hay un déficit de espacios en las cárceles de México, por lo que en lugares convencionales se recluye a gente que delinque de alta peligrosidad, mezclándolos con los reos de delitos no tan graves, lo que hace una mezcla peligrosa”. “En la cultura de la ilegalidad en México no puede haber mayor traición a la ciudadanía que la que hace una autoridad, que un policía esté formando parte de la delincuencia”. Después de los discursos quedó pendiente una segunda convocatoria para concretar en hechos que lleven al plan de la acción contra la delincuencia y a favor de la paz.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario