Radio expresuión
05/Enero/2010/00:53:26
Campesinos, transportistas y miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) bloquearon por más de 10 horas la autopista Tlaxco-Tejocotal y la carretera federal México-Tuxpan en protesta por el alza en el precio de los combustibles, que ha desencadenado un incremento en casi todos los productos de consumo básico.
Por: REDACCIÓN
Desde muy temprana hora, los integrantes del SME tomaron la caseta de cobro de la autopista en el paraje conocido como Texcapa, en el municipio de Huauchinango. Llegaron alrededor de 300 ex trabajadores de Luz y Fuerza del Centro, quienes se atrincheraron en los distintos carriles para dejar circular a los vehículos sin pagar el peaje que, por cierto, a partir del primero de enero, subió de 19 pesos a 20 pesos. Más tarde se decidió el cierre de la carretera federal a la altura de Juan Galindo, y ya no hubo paso hacia la sierra baja.
El movimiento motivó a la policía federal. Cuatro unidades de los uniformados de la Secretaría de Seguridad Pública Federal, llegaron alrededor de las 10 de la mañana al lugar. El que encabezaba el contingente se acercó a los paristas del SME para pedirles que dejaran la caseta de cobro y se retiraran, los electricistas hicieron caso omiso y permanecieron en el lugar dejando pasar gratuitamente a los automovilistas.
Los del SME aprovecharon para botear con los automovilistas, pidieron una cuota voluntaria a cambio de dejarlos pasar gratis, hubo quienes se solidarizaron con ellos, las cooperaciones fueron desde un peso hasta 10.
Los trabajadores del transporte público de pasajeros y de carga, mostraban su solidaridad con los paristas, aparte de la cooperación haciendo sonar sus claxon.
Las cuatro patrullas que llegaron a resguardar la zona, permanecieron muy cerca del paro, las unidades oficiales estaban formadas en hilera, una detrás de la otra sobre la carretera, a escasos 70 metros de la caseta de cobro. Algunos de los uniformados estaban listos para los que les ordenaran, con sus protecciones, toletes, escudos y cascos, como apantallando a los manifestantes; otros estaban tranquilos, serenos, escuchando las consignas contra Calderón y observando el comportamiento de los ex empleados de LyFC; algunos de ellos se dieron el tiempo hasta de echarse una gelatina que compraron con un vendedor ambulante que pasó por ahí.
RAZONES DE PESO
Los transportistas argumentaron que el movimiento “está bien sustentado, se trata de protestar por los altos costos del combustible, especialmente del diesel, pero en general por todo el combustible, sumado a esto está el incremento a las refacciones, incluyendo la llantas, todo ha llegado a estar un 30 por ciento más caro”.
Dijeron que no se compara el incremento que se ha tenido en los insumos con lo que se ha aceptado aumentar las tarifas de los fletes que hacen las unidades con las empresas que le trabajan al gobierno o a otras instituciones.
Según testimonios, lo que las empresas de construcción han aceptado aumentar al costo original es “tan sólo un 5 por ciento en la tarifa, lo que nos hace quedar en una desventaja evidente”, sostuvieron.
Agregaron que para poder dar una respuesta aceptable a los costos, se necesitaría “aumentar un 26 por ciento las tarifas del transporte de material pesado”.
YA NADA NOS INTIMIDA
El paro fue encabezado por los transportistas de materiales pétreos de la región, ellos invitaron al Sindicato Mexicano de Electricistas a solidarizarse con el movimiento contra el gobierno federal que aumentó el precio de los insumos para el trabajo del autotransporte.
Mientras que los representantes del SME estaban con la toma de la caseta de cobro de la autopista federal en Texcapa, los transportistas regionales estuvieron en la entrada a la pista a la altura de El Tejocotal.
Una de las estrategias de los manifestantes fue desviar el tránsito que iba a la parte alta de la sierra por la vieja carretera federal, hacia la pista anticipándoles a los chóferes que el paso era gratis.
En la movilización de protesta estuvieron los transportistas de Ahuazotepec quienes desde horas antes estaban en coordinación con los del SME, y todo transcurrió de manera pacífica hasta que a las once horas, las campanas y cohetes comenzaron a sonar en Juan Galindo, como señal de emergencia, por la presión de los policías federales en la caseta de cobro de Texcapa.
En ese sitio el prosecretario de Divisiones del Comité Central Miguel Márquez Ríos dijo: “ya no nos intimida nada, estamos muy firmes en lo que estamos haciendo, sin caer en la provocación, porque cuando ellos llegaron lo que evitamos fue un enfrentamiento, ellos empujaron a unos compañeros nos hicimos a un lado, nosotros nos dedicamos a manifestarnos, no estamos deteniendo el tránsito, simplemente nos estamos solidarizando con los transportistas, abrimos casetas, estamos pidiendo apoyo económico a los que están pasando, sin quieren adelante si no está libre el paso”.
LOGROS E INCIDENTES
Cerca de las 14 horas, Miguel Muñoz, del municipio de Ahuazotepec, informó a sus compañeros transportistas que sus líderes nacionales habían logrado respuesta a sus demandas respecto al costo del diesel y el peaje. Apenas unos minutos después, un convoy de 9 patrullas de la PF, llegó a la altura de “la desviación” para desbloquear la carretera. Acto seguido los transportistas se “orillaron” al acotamiento facilitando así el tránsito sin mayores incidentes.
El mismo convoy de elementos armados se trasladó a la caseta de Texcapa para intentar mover a los habitantes de Necaxa que la tenían “liberada”. No obstante, los uniformados de la PF descendieron de tres patrullas, haciendo ruido con escudos y toletes y empezando una formación. Inmediatamente los inconformes que se encontraban dispersos se congregaron en torno a los efectivos lanzando consignas prevaleciendo el ya conocido “aquí se ve, la fuerza del SME”. Los elementos de la PF abordaron las camionetas-patrulla y se alejaron para estacionarse a unos cuantos metros del plantón.
En el transcurso del día, el chofer de un camión de la empresa Autotransportes Unión Serrana (AUS), inconforme por el cierre del acceso a Huauchinango, en el entronque cercano al paraje conocido como “La Virgencita”, bloqueó por completo la circulación por un tiempo aproximado de 40 minutos, impidiendo así el paso de los automóviles que se dirigían hacia la caseta con rumbo a la ciudad de México.
Este hecho, generó la irritación de automovilistas que ya formaban una larga hilera y de los electricistas pues algunos los culpaban por dicho bloqueo. Ante la negligencia del chofer para mover su unidad, varios automovilistas irritados dijeron estar dispuestos a prenderle fuego al camión. Unos minutos más tarde, Miguel Montiel, subsecretario del exterior del SME-Necaxa se presentó para pedir que el autobús fuera movido sin que hubiera mayor problema.
La toma de la caseta de Texcapa duró hasta las 18:30 horas sin mayores incidentes. Los habitantes de Necaxa y trabajadores de Luz y Fuerza en resistencia se alejaron cuando fueron convocados por Miguel Márquez Ríos,. Mientras que los elementos de la PF permanecieron a lo lejos observando cómo se dispersaba la movilización.
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